24 de febrero de 2014

ONESHOT: Different minds

Título: Different minds
Autor: SooLen 
Género: Yaoi
Grupo: INFINITE

Personajes principales: Myungsoo | Sungyeol
Nota: La historia es narrada por Myungsoo.
Si quieres leer la segunda parte de este oneshot, da click aquí:
ONESHOT: Game over


Different minds.
Entonces ahí estaba Myungsoo frente a mí, diciéndome que aún me quería, que aún no podía superar aquel pasajero amor. 

Me quede sin palabras, mirándolo fijamente. No podía creer que él aún sintiera algo por mí, no después de haberme dejado de la manera en que lo hizo.


-Lee Sung Yeol, ¿no tienes una respuesta? –susurró suavemente- Sé que te hice daño, pero por favor, no te quedes callado.

Escuché vagamente aquellas palabras que provenían de él, con esa voz que todavía lograba ponerme los nervios de punta.
Poco a poco mis sentidos iban regresando a mí. Mi mente recorrió como si fuese una cinta, todo lo que había pasado a su lado, los pocos días que estuve junto a él. 

Sí, mi corazón una vez más latió fuertemente a causa de él, a causa de su mirada tierna e insegura pero al mismo tiempo tan fría y distante.

Recordé la forma en que él decidió terminar todo, la forma en que discretamente,  más de una vez me dijo que no quería estar a mi lado. Pero aun así, ¿por qué mi corazón estaba confundiendo tanto a mi razón? Lo sé, tal vez aún lo quería o simplemente, tal vez sólo quería proteger lo poco que había quedado entre nosotros.
Sentía mi cabeza a punto de explotar, sentía que este era un drama con un pésimo escritor.

-Esto –me quede callado por unos segundos- Juro que esto parece un drama. –continúe diciendo-

Sigilosamente alce la vista y me encontré con sus ojos nerviosos mirándome fijamente, y sonriendo tímidamente. Él sabía la respuesta que le daría, a pesar de que yo aún no lograba descifrarla.

-No, simplemente no puedo razonar estas palabras. –volví a romper aquel silencio, intentando esconder mi mirada de la suya-

-¿Por qué? –preguntó, el sonido de aquella pregunta me entumeció. Él ya sabía la respuesta, pero esperaba a que yo mismo lo dijera-

-He conocido a alguien, lo sabes. –se quedó callado, asintiendo con la cabeza- Lo que sentía por ti, ya lo he superado.



Al fin las palabras salieron, me dolía decirle aquello, me dolía ver aquella sonrisa en él que sólo mostraba cuánto se estaba destruyendo por dentro.

-No sé qué siento ahora por ti. –continúe- Has llegado a confundirme. -Lo siento –respondió suavemente, casi inaudible-

Me sentía nervioso, confundido ¿Que viniera a decirme que aún sentía algo por mí era confiable? Ya no sabía qué creer, probablemente mañana se arrepentiría y entonces perdería toda oportunidad.

-Espera, tengo que pensar las cosas –dije, removiendo mi cabello con ambas manos-

Enojado, de esa manera me sentía. Él fácilmente llegaba a decirme que aún me quería, como siempre pensando sólo en él. Y aquella estabilidad que había logrado encontrar, la había perdido con unas cuantas palabras suyas. No era justo ante mis ojos.

¿Aún sentía algo por él? Ahora era esa la pregunta que merodeaba de un lado a otro por mi cabeza. Tal vez sólo fue una atracción momentánea, algo que no iba durar dentro de mí por mucho tiempo y que probablemente, que las cosas terminaran rápido fue lo mejor.

-Sólo hay una forma de saber qué es lo que quiero. –le dije, mirándolo por unos segundos-

Él me miró, sabía a lo que me refería, podía leerlo en sus ojos.

Me acerqué a él, hasta tenerlo a unos centímetros cerca de mí. Posé mis labios sobre sus labios un tanto tensos y sorprendidos, como aquella primera vez. Poco a poco fue correspondiendo, con cierta desconfianza, sin ganas de hacerlo. Él sabía la respuesta y no quería corresponder aquello que después lo iba a dañar.
Deje de besarlo, cayendo encima de mí la realidad de lo que había hecho, haciendo que me perdiera en mis pensamientos unos segundos. Sentí como tristemente él me abrazó, como si él estuviese enterado de que no podría abrazarme después de esto. Dude, pero al final terminé correspondiendo aquel abrazo.

-Lo siento, ya no siento nada por ti. –dije entrecortadamente, susurrándole casi al oído-
Sus brazos inmediatamente se negaron a abrazarme, pero lo retuve por unos segundos más a mi lado.
-No te preocupes. –respondió con una sonrisa fingida- Luego platicamos, ¿sí? –continuó-
Se levantó y caminó, mientras yo sólo podía observar cómo se alejaba. No sabía si había sido la decisión correcta, no sabía qué pensar en ese momento. Sólo sabía que aquella plática jamás iba a llegar.

Sin darme cuenta corrí por él, quería rescatar lo que pudiese quedar entre nosotros dos. Lo sujeté de su cintura, pidiéndole que no terminaran las cosas mal. Pero fue en vano, él soltó fríamente mis manos y se fue.


Ahora sólo me puedo preguntar si fue la forma más correcta de decirle que ya no sentía nada por él, si él tiene el derecho de enojarse por aquella respuesta después de lo que me hizo. Tal vez, si no lo hubiese besado y hubiera aclarado de diferente manera lo que sentía por él, hubiera ayudado a que las cosas ahora fueran diferentes. Sin embargo, ya no sé quién daño más a quién.

1 comentario: